Cloud Computing es uno de esos términos que ha pasado de ser moda a una necesidad y una solución que cada vez está más presente en todos los ámbitos de nuestra vida.
En pocas palabras, es colocar tus recursos computacionales en internet en lugar de concentrarlos en un disco duro o memoria de una computadora. La principal ventaja aparente es tener acceso en cualquier momento y a cualquier hora a tu información, pero al fin y al cabo, es mucho más que eso.
La computación en la nube ofrece un conglomerado de recursos de computación con mantenimiento constante, seguridad, de fácil acceso y bajo demanda.
No en vano el director ejecutivo de Salesforce, la empresa líder en el mundo de cloud computing, Marc Benioff, la ha comparado con una democracia. “La nube proporciona servicio a empresas de todos los tamaños… la nube es para todo el mundo. La nube es una democracia”.
La computación en la nube, revolucionó la forma en que se relaciona el usuario con su propia información y sus recursos computacionales. El funcionamiento del cloud computing dispone de un espacio en servidores o data centers en los que se accede de manera centralizada a recursos como archivos, software, soluciones o tecnologías que el usuario puede utilizar desde cualquier lugar en el mundo con acceso a internet.
Historia del cloud computing
Aunque parece nuevo, el término se introdujo en la jerga de especialistas en los años sesenta. En la misma época en que se comenzaba a desarrollar el internet como red de computadoras conectadas, principalmente entre la academia y el sector militar, la avanzada tecnológica ya buscaba la forma de operar grandes cantidades de datos de forma remota.
Uno de los momentos más importantes en la historia del cloud computing es el nacimiento de Salesforce en 1999. A partir de la expansión del concepto aplicado por Salesforce, se pretendía ofrecer aplicaciones relacionadas al funcionamiento empresarial por medio de páginas web y el internet.
Pese a la analogía utilizada para dar nombre a la solución en la nube, los archivos o programas se encuentran en discos en sitios concretos. Sin embargo, su acceso remoto en cualquier lugar del mundo conectado a internet es lo que llevó a buscar la metáfora de la nube.
Tipos de cloud computing
Existen diferentes tipos de nubes: la nube pública, la nube privada, la nube híbrida y la nube comunitaria.
La nube pública es la utilizada de forma simultánea, aunque de forma separada por diversas empresas.
Como sus nombres lo indican, la nube privada es constituida por una sola organización con su propia red de servidores para la utilización exclusiva, sin un punto de acceso público.
La nube híbrida está compuesta por dos o más nubes que se constituyen como entidades únicas, aunque unidas por una tecnología estandarizada.
La nube comunitaria se trata de diversas organizaciones que se reúnen en un conglomerado colectivo poniendo a disposición sus recursos para uso compartido.
Utilidades
La utilización de la nube en la vida cotidiana de las personas o de las empresas, tiene diversas utilidades. Una de las argumentaciones para utilizar recursos en la nube, ya sea almacenamiento o software, programas o soluciones específicas, es disminuir el uso de recursos locales por parte de las organizaciones y lograr centralizar todo el material que necesite un colaborador en cualquier lugar.
De esta manera, las organizaciones ahorran en diversas áreas y, además, en su mantenimiento, actualización y otras situaciones que trae consigo la infraestructura para cumplir con las necesidades informáticas de forma local. Esto sin considerar la inversión que significa en tiempo, personal y hasta espacio en sus oficinas. La nube permite baja costos de operación cotidiana de las empresas ya que utilizan recursos compartidos y por el tiempo que lo necesiten.
La utilización de la nube agiliza la adopción de tecnología, permitiendo a las empresas dar pasos agigantados en cuestión de transformación y crecimiento digital.
Principales características del Cloud Computing
Bajo demanda: No es necesario consultar a alguien o tener un profesional de TI involucrado en la provisión del servidor o del almacenamiento en la red. Usted tiene la capacidad de computación necesaria cuando la necesita.
Multiplataforma: Basta tener conexión a Internet para acceder al servicio en su laptop, tablet, smartphone o computadora de escritorio.
Recursos en pool: Sigue el modelo de multiusuario, lo que significa que hay varios usuarios del software.
Flexibilidad rápida: El usuario tiene una experiencia que es dimensionada con base en la demanda y en la real utilización. Imagine un hotel que cambie el tamaño de la cama de queen size a king size en la misma “habitación”.
Servicio medido: La utilización de recursos es monitoreada, controlada y reportada de manera anticipada. Esto torna la capacidad de computación esencialmente la misma en relatada a un servicio de utilitarios pagados.
Salesforce recomienda
Las recomendaciones de Salesforce para utilizar la computación en la nube, tienen que ver con la fexibilidad que te brindan los servicios en la nube, tanto para el crecimiento como para aplicarlo en diversos proyectos y atender demandas de forma instantánea. Recuperación de forma acelerada y segura, con respaldos automatizados y otros beneficios que permite la tecnología del cloud computing. La actualización automática de la plataforma que se realiza por la operadora de la nube. La posibilidad de acceder a tus archivos y trabajar desde cualquier lugar, algo muy valioso en momentos en que el mundo ha vuelto a ver al teletrabajo y las formas colaborativas a distancia.
Modelos de cloud computing
Existen tres modelos básicos de los servicios de computación en la nube.
SaaS (Software as a Service, Software como servicio de computación en la nube), consiste en el uso de un software por medio de un navegador o un programa. Aplicación muy popular, casi el 60% del total de las cargas de trabajo en la nube son con este modelo, en 2018.
PaaS (Platfoprm as a Service, Plataforma como servicio) aprovecha los beneficios de la computación en la nube y agrega la posibilidad de desarrollar aplicaciones personalizadas del software.
IaaS (infraestructura as a Service, infraestructura como servicio) brinda a las organizaciones y empresas la posibilidad de utilizar recursos brutos del servidor mientras el resto de la administración de la plataforma ay del software es de responsabilidad de la empresa.
La capacidad transformadora de la computación en la nube no ha llegado a su límite. Justamente ese es uno de sus aportes a la computación en general, el constante desarrollo y la potencia de tener acceso siempre, desde cualquier lugar a cualquier servicios, archivo o plataforma que desee.
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